Hola Garcías,
Ya he vuelto del viajecito por la costa Europea. ¿Qué si he descansado? Pues solo diré que he hemos ido 8 tíos en una furgoneta y que de 6 noches solo hemos dormido una en hostal… El resto ya os lo iré contando.
Así pues, sigo de vacaciones, ahora por mi tierra, descansando. Dirás que tengo mucho morro por tener tantos días de vacaciones, pues no, yo tengo mis 22 días como todo el mundo, pero tengo la “suerte” de que me obligan a cogérmelos todos ahora. Mucho mejor, así no me quedan días para Navidad y puedo pasar el fin de año solito :).
Pero vamos a lo que vamos, la vuelta a la caña y tapa :). Hoy he pensado hacer un homenaje a una compañía que ha conseguido convertir el concepto de vuelo de vacaciones en un cabreo asegurado. Efectivamente, estoy hablando de mis amigos de Ryanair (rallaner pa los españoles).
Esa compañía que nunca decepciona y siempre sorprende. Cuando crees que no te pueden fastidiar más, van y lo consiguen.
El método que usan es como un los pimientos del padrón, que al principio saben ricos y luego, cuando ya no hay marcha atrás, te joden la vida.
Empiezas ilusionado, planeando un viaje entras en su web. Por favor, yo sé que hay que dar oportunidades a las personas con discapacidades, pero si les hace la web un daltónico que por lo menos la revise alguien después. Porque si no la ha hecho alguien con serios problemas de vista, no entiendo ese color amarillo chillón que te derrite la retina. Si es que ese color convierte la búsqueda en un deporte de riesgo porque sabes que si en 10min no has encontrado tu vuelo, te quedas sin ojos. Si, tu ríete, pero las búsquedas en la web de Ryanair son la tercera causa de ceguera en España (justo detrás de los escotes de las alemanas y de los abuelos nudistas).
Pero no te creas que esto es casualidad. Está todo pensado. Es una táctica para colarte otro gol (y digo otro porque el primero ha sido conseguir que entres en su web). Con la vista cansada empiezas a buscar tu vuelo y encuentras uno tirao de precio, solo 14,99€. Y empiezas el proceso ilusionado dándole al click.
Al entrar te das cuenta que el de 14,99€ solo sale los martes de luna llena a las doce y un minuto desde el anden 9 y ¾. Así que te tienes que ir a la segunda opción de 29,99€. Ya te empiezas a mosquear. Pero te mosqueas aún más cuando ves que las tasas son 14,99€ más. Así que redondeando, ya te sale por 45€. Pero sigues adelante y miras el vuelo de vuelta. Este empieza por 19,99€ que luego son 65€ con tasas.
Así que tus 35€ ida y vuelta de pronto se han convertido en 110€. Pero aún hay más, tienes que ir pasando pantallas sorteando todos los obstáculos que te pone la web. Porque son tan amables que te seleccionan automáticamente el seguro, las maletas, el coche, piso…
Como el proceso puede ser largo y el amarillo intenso, mi consejo es que hagas turnos con otro amigo para ir seleccionando. Si al final de todo no te han colado nada más, solo faltará añadir el recargo de pagar con tarjeta (10€ ida y 10€ ) y el del checking online (5€ ida más 5€ vuelta).
Pero digamos que ya sabes un poco y lo has hecho bien, estamos en tan solo 140€ (4 veces el precio inicial). Y asegúrate de tener impresos los billetes porqué sino hay que sumarle otros 40€ por trayecto.
Así que con la cara de tonto, con tu ganga bien impresa, te vas al aeropuerto. Lo lógico sería pensar que después de todo lo que has pagado, ya no tendrías que tener problemas. Pues no es así. Porque para ahorrarte facturar maleta, te has comprado una de mano y vas con la tensión de si cumplirá las medidas.
Aquí quiero hacer un llamamiento para que los chinos y Ryanair se pongan de acuerdo en cual es el tamaño de maleta de viaje. Porque cuando te compras la maleta en los chinos siempre te dicen que está bien, y los segundos que no.
Pero una vez más, tu has hecho los deberes y has medido la maleta. Da igual, porque el cacharro se encoje en cuanto la ve y la única forma que tienes de meterla es a presión. Para darte ánimos, ahí está una azafata (que viendo la belleza y simpatía veo que el lowcost también las incluye) que te dice sin parar <<Sr. eso no cabe ahí.>> Y tu piensas: eso decía mi mujer y mira… Y es que en momentos de estrés nos volvemos graciosillos.
Luego viene la aduana de los documentos de identidad (que creo que cualquier día te piden el carné de vacunación) y lo mejor de todo: la carrera. Porque eso de los asientos es a maricón el último.
Así entramas sudado, a empujones y con un cabreo de tres pares de narices hasta tu asiento. Por lo menos podré descansar. ¡Qué va hombre! 2h30min de publicidad non-stop pa ti.
Pero hay en algo en que son igual que el resto de compañías, los retrasos. Y no pidas compensación porque tu mismo te ahorraste el seguro de viaje.
Pero lo mejor de todo, es que después de esta magnífica experiencia, viene un amigo y te dice:
- He encontrado un vuelo en rallaner tirao de precio por solo 14,99€.
- ¿Enserio? ¡Pues vamos a cogerlo ya!
Jeje! cuanta razón! la semana pasada corrí como una desgraciada por el aeropuerto de Luton (London) porqué perdíamos el vuelo (culpa del mercadillo de Portobello un sábado a la mañana) y cuando conseguimos embarcar, a punto de salirnos el corazón por la boca, y habiendo embutido el bolso y la cámara dentro de la maleta de mala manera, nos tuvieron una hora esperando (es decir, la rigurosa hora de retraso) porque se les había fundido una bombilla y la tenían que cambiar... que majos estos de rayanair! (en setiembre vuelvo a volar con ellos ;)
ResponderEliminarPara vuelta con Ryanair la nuestra el año pasado desde Belgica... que si facturamos 2 instumentos en uno, que si pasan mi cartera y mi movil y a mi no me dejan pasar, que tengo que pagar otro instrumento y no tengo cartera ni movil para llamar... Para asegurar, todos en Iberia 1ª clase! Un Abrazo!!
ResponderEliminarJajajaja Ya sabes Laura, si no hay bombillas no puedes avisar a la azafata para comprar unos cigarrillos electrónicos de esos :).
ResponderEliminarDiego, es que eso de volar con instrumento en "rallaner" es solo para másters jajaja.