miércoles, 12 de septiembre de 2012

Evitando dar celos


Esta semana una amiga hablaba en su blog de los celos. Creo que el tema da mucho que pensar. Pensar en como los sientes y que te llevan a hacer, en lo mal que lo pasas y lo haces pasar, de cómo puedes evitarlo, de cómo puedes ayudar a evitarlo a otras personas… Como ves, hay tema para varias entradas y libros (que seguro que hay) pero hoy he decidido que quiero compartir contigo un truquillo para evitar que tu pareja sienta celos. Otro día ya hablaremos del resto.

Es verdad que cuando tu pareja siente celos te sientes como más especial y puede ser hasta divertido. ¿Divertido? Si, como hacer de rabiar a tu hermano. Pero en el fondo, aunque sea muy poquito, el otro lo está pasando mal.

Cuando la otra persona siente celos; en parte  se siente rechazada por ti. Es como si estuvieras en otro equipo con otros intereses. Y si dentro de una pareja hay dos equipos, empieza la competencia, inseguridad, el miedo, etc… una espiral que ahce que la relación acabe cayendo en barrena. Es como un tumor de la relación.

Voy a presuponer que si tienes pareja es porque quieres,  y por lo tanto querrás evitar coger un cáncer de pareja.

¿Pero cómo? ¿Le doy explicaciones todo el rato para que se tranquilice? Pues eso tampoco es muy buena idea. Explicación no pedida, acusación manifiesta. Al dar explicaciones te estás defendiendo de una acusación lo cual hace que se presuponga que eres culpable. Eso refuerza tu sentimiento de culpabilidad y sus celos.

Lo que te propongo hoy lo aprendí de una persona a la que aprovecho a dedicarle la entrada.

Durante un tiempo tuve una relación a distancia, mucha distancia. Tanta distancia que decidimos que lo mejor era ser no-novios (que consiste en actuar como novios cuando hablábamos o nos veíamos, pero tener la libertad de conocer a otras personas). Como comprenderás, eso de hablar con alguien a quien quieres, que está en la otra punta del mundo y que además hemos acordad que puede hacer lo que quiera; es la situación ideal para que se produzcan celos.

Sin embargo lo supimos llevar bastante bien y creo que eso se debe en gran medida a su actitud. Ella me enseñó una forma genial de evitar los celos con tu pareja sin entrar en dar explicaciones o dejar de hacer nada.

Su ‘truco’ consistía en explicarme cualquier cosa que hubiera hecho, incluso hablándome de otras personas, pero explicarlo de tal forma que quedase implícito que no había peligro.

Por ejemplo, pongamos que un amigo se pela con su novia y va a casa de no-novia a hablar hasta las mil. Una forma de explicármelo hubiera sido:

“Juan se ha peleado con su novia y se ha venido a mi casa. ¡Hemos estado hasta las mil!”

Explicado de esta manera, mi miedo me podría llevar a pensar que hay un tipo que se ha peleado con su novia (así que igual lo deja con ella) y se ha ido a casa de mi no-novia (a hacer no sé qué) hasta las mil.

Como ves, no me quedaría muy tranquilo. Sin embargo ella lo hubiera explicado algo así como:

“Hoy ha venido Juan a casa y hemos estado charlando en el salón hasta las mil porque se había peleado con su novia y no sabía como arreglarlo.

Aunque la información sea prácticamente la misma, al decirlo con estas palabras y con mucha naturalidad, me transmite mucha más seguridad. ¿Porqué? Pues las claves están en:

   Naturalidad: Como se trata de una situación sin peligro, es importante explicarla con naturalidad. Su tono transmite que no hay motivo para ponerse nerviosa porqué no ha pasado nada raro.

   Dar algunos datos que implican que no hay peligro: “charlando en el salón” implica que no han subido a la habitación así que es poco probable que hayan pasado a mayores. Por otro lado, el decir que “no sabía como arreglarlo” implica que él tipo  quiere volver con su novia por lo que no tendría que ser una amenaza para mí. Lo importante de este punto es no incluir datos explícitos de que no ha pasado nada. Por ejemplo, haber dicho “no hemos subido a la habitación a hablar sino que nos hemos quedado en el salón” habría generado muchas más dudas.  Lo ideal es ser capaz de dar datos de los que SE DEDUZCA que no ha pasado nada.

   No excusarse: Como hemos dicho, la excusa/explicación no es una buena herramienta. Si no ha pasado nada, no hay porqué excusarse. Evitar los “es que…” o “pensé qué...” que harán que parezca que has hecho algo que no deberías haber hecho.


Con estos truquillos ella conseguía que me sintiera muy tranquilo sin darme una sola explicación. Nunca supe si lo hacía conscientemente pero fue toda una lección de cómo prevenir el tumor de los celos. ¡Gracias!

1 comentario:

  1. Lo hacía así porque es lo natural en una relación sana, confiar en tu pareja y transmitirle confianza es la base de cualquier relación!
    Un beso muy fuerte y a seguir dando herramientas para ayudarnos a ser tipo/as con suerte! Gracias!

    ResponderEliminar